Nuestra Historia

Nuestra Historia

La historia de Vinos Andrade: Pasión mexicana embotellada.

 

En el corazón vinícola de Ensenada, Baja California, donde el mar y el desierto dialogan con el viento y la tierra, nace Vinos Andrade. Una marca orgullosamente mexicana que refleja el alma de su origen en cada botella: pasión, tradición y excelencia.


Un sueño hecho vino.

Vinos Andrade es más que un viñedo. Es la manifestación de un sueño que honra el carácter del vino de autor, elaborado con uvas seleccionadas y un profundo respeto por la tierra. Cada línea representa una etapa, una emoción, una intención:

 

  • ELIXIR

    Nuestra línea de vinos jóvenes, vibrantes y afrutados. Son el reflejo de la frescura, del primer sorbo que enamora. Ideales para compartir, para disfrutar, para celebrar la vida cotidiana.

  • RENACER

    Vinos que han descansado durante 12 meses en barrica, adquiriendo complejidad, cuerpo y elegancia. Esta línea representa el momento en que el vino despierta su carácter, donde la madera y la fruta encuentran un equilibrio armonioso.

  • SORTILEGIO

    Nuestra línea premium, para apasionados de la enología. Con más de 22 meses de crianza, éstos vinos son el resultado de tiempo, paciencia y maestría. Cada trago es una experiencia sensorial completa, una caricia al paladar, un homenaje a la enología mexicana.

 

Más que vinos, una comunidad.

Vinos Andrade no solo produce vinos, vive el vino. Formamos parte de eventos como la Feria del Vino y el Queso, impulsamos la cultura del buen beber y participamos activamente en la promoción del vino mexicano. Además, colaboramos con productores de mezcales, destilados y otras bebidas artesanales, creando alianzas que enriquecen nuestra propuesta y celebran la diversidad de nuestra tierra.

 

Pasión en cada botella.


Cada botella de Vinos Andrade lleva el sello de una historia bien contada, de una uva bien cuidada y de un equipo que cree en el poder del vino para reunir, emocionar y trascender.

Porque no vendemos solo vino: compartimos una forma de ver la vida.

¡Bienvenidos a Vinos Andrade!

Aquí, cada sorbo cuenta.

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